Tras el impacto de nuestras
pérdidas y, transcurridos unos meses (el periodo es variable) en los que el
dolor y la pena nos sumen en una profunda apatía emocional, las madres y los
padres del Agua comenzamos, lentamente, a asumir la terrible experiencia que
hemos vivido. Este proceso de aceptación de la realidad, al que se suele
conocer como “duelo”, supone un arduo camino plagado de enormes vaivenes
emocionales. Ira, rabia, estupor, incomprensión,
desazón, rebeldía, soledad, son sentimientos usuales tras la muerte de un ser
querido.
Asumir todo lo que nos ha pasado
y el hecho de que hemos perdido a nuestro bebé para siempre es tan devastador
que nuestra psique, nuestro yo, nuestro ego se derrumban, tras su marcha, como
un castillo de naipes. La persona que fuimos antes de la pérdida jamás volverá.
Fuimos una, uno, ahora somos otra, otro.
Coincidiendo con el duelo, tras
haber superado la fase de shock y profundo abatimiento, tenemos otra
intensísima tarea por realizar, la de buscarnos, reencontrarnos y
reconstruirnos. Fuimos un@ que jamás volveremos a ser.
Al igual que la metamorfosis que
realiza la humilde oruga para convertirse en una espectacular mariposa, nosotr@s
podemos decidir el camino a seguir en nuestra nueva vida. Siempre llevaremos en
nuestro corazón el dolor por el bebé que perdimos, eso estará imperecederamente
integrado en nuestra personalidad, pero tenemos que seguir adelante y, tal vez,
esta tremenda y terrible experiencia nos pueda servir para reconducir nuestras
vidas y lograr ser la persona que siempre quisimos ser.
Cuando nuestro bebé se marcha nos
encerramos en un capullo de frustración, dolor, desgarro y pena. Existimos casi
sin vivir, respiramos y comemos, por no sucumbir. Para, poco a poco, poder
abandonar la oscuridad del capullo y volver a nacer a la luz de la Vida, cada
un@ de nosotr@s debemos seguir nuestro propio camino de autoconocimiento y de
crecimiento personal. Todo proceso de metamorfosis es largo y complejo, pero,
al final del túnel, incluso del más profundo y oscuro, siempre hay una luz. Tal
vez la tuya ahora no la veas, no la sientas o te parezca muy pequeña, pero, no
te angusties por eso en este momento, date tiempo y tú también la hallarás.
Decía Elisabeth
Kubler-Ross que la
muerte no marca un punto final, sino una mutación de estado y
así es, no sólo para los que se marchan, sino también para los que nos
quedamos.
Nosotras y nosotros somos las Mamás y Papás Mariposa, las Mamás y los Papás en proceso de metamorfosis, de
transformación tras la pérdida de nuestros amados y añorados Niñ@s del Agua.
lindas palabras Elena y si,en ello estamos en esta linda metamorfosis y reencontrandonos con nosotr@as.....a veces más conectadas...otras de forma más solitaria pero siempre enriqueciendonos,creciendo como mamas,papas,seres humanos caminando en amor gracias a estos seres lindos, los que nos acompañan con su presencia física y los que nos acompañan desde otro plano.
ResponderEliminarMuchas gracias Sara. ¡Un fuerte abrazo!
EliminarElena
Completamente de acuerdo! Un abrazo desde el Alma.
ResponderEliminarMónica
Gracias querida amiga,
EliminarUn abrazo muy fuerte, de corazón a corazón <3
Elena
Maravilloso, gracias!
ResponderEliminarGracias a ti María,
ResponderEliminarUn abrazo,
Elena
Soy otra madre de agua, tengo ahora mismo 3 niñas hermosas, dos de ellas nacieron despues de la perdida, muy bellas y sanas pero mi bebe que nunca pude tocar aun duele y duele mucho... lo más dificil es que siento que a la unica persona del planeta que le duele ese bebe es a mi, mi esposo lloro como mucho una noche el resto del mundo lo olvido y yo me quede con ese vacio para siempre
ResponderEliminarQuerida Mamá,
EliminarHabla de tu bebé, escribe su historia, cuéntasela a sus hermanas, seguro que ellas les gustará conocer tus sentimientos y vivencias. Ella sigue siempre contigo, junto a tu corazón.
Un abrazo muy muy fuerte,
Elena
A mi me pasa exactamente lo mismo, aunque yo no soy madre de agua xq mi bebe si nacio bien ella se fue a los 4 dias entonces me identifico mucho, uno tiene q ser fuerte y seguir adelante en un mundo donde nadie te entiende y te regañan o te juzgan sin saber xq te comportas de cierta manera...!
EliminarSon situaciones durísimas. Necesitamos mucho más apoyo y comprensión social para poder hablar de nuestra pena y de nuestro dolor sin sentirnos juzgadas.
EliminarMuchas gracias por tu comentario,
Un abrazo muy muy fuerte,
Elena
Mi hijo murió a las 38 semanas de embarazo dentro de mi. Lo más triste del mundo. Y me siento también mal porque lo vi llorar a su padre un día solo. Siento q sólo lo sufro yo.
EliminarQuerida amiga,
EliminarSiento muchísimo tu pérdida. Perder a nuestros hijos es la vivencia más dura y dramática por la que muchas de nosotras pasamos en nuestra vida, además, como comentas, muchas veces tenemos la sensación de ser las únicas que nos acordamos de ellos, las únicas que les amamos, las únicas que sentimos su ausencia. En estos casos, tenemos que sacar nuestra pena a la luz, verbalizarla y hablar con las personas de nuestro alrededor de todo lo que sentimos, de todo lo que pensamos.
Te envío un enorme abrazo,
Elena
bonitas palabras y te doy toda la razon nunca se olvida esa vida q llevaste en ti y nunca tendras. aunque pasen años siempre sera nuestra niña.
ResponderEliminarSiempre lo será, siempre l@s recordaremos, al principio con mucha pena y dolor, pero, siempre estarán en nuestros corazones y hacia ell@s sentiremos infinito Amor.
EliminarUn abrazo muy fuerte,
Elena
Perdi a mi beba hace poco mas de un mes, en la semana 17 me dieron la triste noticia de que no sobreviviria mucho tiempo mas y en la 20 se fue...fue muy triste y muy duro ir a cada control sabiendo que en uno ya no escuchariamos su corazoncito...
ResponderEliminarSiento un dolor y un vacio tan profundo que en este momento me parece incurable...también siento que mucha gente no comprende que sienta tanto dolor...llegue a pensar que yo estaba sobredimensionando las cosas hasta que lei este blog y me di cuenta que no, que es normal sentirme asi por mi bebe de agua, que muchas mujeres sienten igual... y esto me hizo bien, me reconforto el alma, gracias Elena!
Mi bebe de agua, mi pequeña Victoria, me dejo un amor eterno e irremplazable.
Querida Mamá,
ResponderEliminarPor supuesto que es normal sentirse triste, sola, hundida tras la pérdida de tu bebé.
Perder un hijo es la experiencia más dura, estresante y devastadora por la que pueda pasar una madre en esta vida. Aunque tu bebé, para el resto del mundo, era pequeñita , para ti lo suponía todo: Amor infinito, planes, ilusiones.
Tienes derecho a estar triste, a llorar, a enfadarte. Todos tenemos derecho a llorar a nuestros ausentes, y más si cabe, si es un hijo, además, también necesitamos hablar de nuestros bebés, hacerle comprender al mundo que ellos fueron, estuvieron aquí y siguen con nosotras, en nuestros corazones.
Querida amiga, siéntete libre de hablar de tu preciosa Victoria y de llorarla, para elaborar un duelo sano es importante hacerlo. También, para honrar la ausencia física de tu hija.
Un abrazo muy fuerte, comprendo tu dolor, lo comparto,
Elena
Hola elena muchas gracias, siento que haz descrito todos y cada uno de mis sentimientos tuve dos pérdidas. La primera el anio pasado en setiembre fue espontaneo y tenia un mes de embarazo me dolio mucho sentia,rabia,desconauelo pir eso a los dos meses lo volvi a intentar en diciembre ya tenia un mes de embarazo y solo contaba los dias para sentir la seguridad de que todo estaría bien, y aunque no era de riesgo y todo marchaba bieb me controa no se si fue la falta de experiencia de la dra porque pese a algunos si tomas que se que ahora son del aborto retenido que tuve ella no se dio cuenta y yo tampoco era mi primer bebe estabamos tan emocionados incluyendo mis papas, con la ilusión de que tal vez seria in ninio ya que somoa tres mujeres, tebia trea mesesy una semana y tras conversar con mi suegra por internet en la madrugada debido a que ninguna de las dos podía dormir coincidenteme me aconsejo ir a otra dra pirque la otra solo me mando reposo y geslutin debido a que pensaba era una amenaza, la nueva dra inmediatamente me mando una ecografía pensando que se trataba de placenta previa era 14 de febrero se supone que saldria acenar con mi esposo o hariamos algo romantico pero no ahi estaba viendo enun monitor una hermosa pequenia figura humana perfectamente formado sin latidos no puedo describir el profundo dolor que senti,jamás. Hubiera imaginado eso, no llore, de regreso a casa llore un poco, llame a mi esposo y deje salir mi dolor senti el suyo, la ilusión se habia esfumado dejando entrar la tristeza y desconsolacion pero a pesar de todo estaba agradecida porque por el tiempo del bebe sin latido pude haber sufrido una infecc generalizada no les miento ya mi vida misma en ese momento no me importaba pero suponia que era por algo, estaba tan ilusionada con ese bebe ya lo veia en mis brazos, ver a mis amigas ahora con sus pancitas ahora aun sigue causandome tristeza mi esposo me sugue escuchando pero se que le afecta verme asi aunque ya me siento mejor y por lo menos parezco haber regressdo a la vida pirque esos dias ya no reia, ya no queria nada. Sifo tratando se seguir adelante de ser optimista y pensar que de aca cinco meses mas podre intentarlo nuevamente, pero jamás olvidare mis bebes de agua<3
ResponderEliminarkaren
Querida Karen, siento muchísimo tus pérdidas y todo la pena y sufrimiento que habéis pasado. Comprendo tu dolor y te acompaño en él. Perder a un bebé (aún peor a dos) es una experiencia terrible y demoledora.
ResponderEliminarAhora tanto tu cuerpo como tu mente tienen que recuperarse y reconstruirse. Cuídate y mímate mucho, necesitas recuperar todas tus fuerzas. No dejes de sacar tu dolor, de llorar si lo necesitas, de hablar de tus bebés.
Un abrazo muy muy fuerte,
Elena
Hola. Nosotros perdimos a nuestro bebé hace casi un mes en la 11a semana de embarazo, comenzó como amenaza de aborto y teminó en legrado. Fue muy doloroso, unos días despues cuando ya estaba en mi casa mi esposo y yo nos despedimos de nuestro pequeño, le dijimos cuánto lo amamos y esperábamos y le contamos todos los planes que habíamos pensado para con él, que siempre vivirá en nuestros corazones. seguimos apoyándonos uno al otro.
ResponderEliminarSiento muchísimo tu pérdida. Te envío todo mi apoyo, todo mi cariño.
ResponderEliminarUn hondo abrazo,
Elena
Perdi a mi nena hace tres años y no puede embarazarme otra vez e asumido esa parte con mucho dolor.. Esta cerca la fecha de su naciniento y partida y vuelve el dolor de la perdida y hay que pasarlo sola, porque para los demas ella no existio, se que poco a poco me dolera menos y seguiremos adelante.
ResponderEliminarClaro que existió, es tu hija y la amas, para siempre, por siempre.
EliminarUn abrazo muy muy fuerte,
Elena
Hola hace casi un año fui mama de una niña del agua,mi pekeña venia con una placenta percreta y yo me estaba desangrando x los agujeros q se habian hecho en mi utero asi q entre en el kirofano de 22 semanas notando como Paula m acariciaba desde dentro y sin saber si la sentiria mas...al despertar nadie m dijo q habia pasado y tuvo q ser mi familia la q me contara q mi niña no se habia vivido y q me habian practicado una histerectomia parcial.Despues de tanto tiempo la echo de menos cada dia...y siento tanta rabia...ira x su ausencia e incomprension x parte de la gente...pero cada dia le hablo a mi hija mayor de su hermanita e intento explicarle ya q con cuatro años es la unica q no me juzga por extrañarla.gracias x el texto...espero ver la luz pronto
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